gasa para heridas

Las heridas en la piel son una de las principales causas de consulta médica. Según la OMS, cada año se producen 4,8 millones de consultas médicas por heridas en todo el mundo.


Aunque la mayoría de las heridas son leves y se curan sin problemas, algunas pueden ser más graves y requieren tratamiento especializado.
Una de las principales complicaciones de las heridas es la infección, que puede afectar a la piel y a los tejidos blandos y ser muy dolorosa.


Para evitar la infección, es importante limpiar la herida y cubrirla con una gasa estéril.

Las gasas para heridas son un material absorbente que se utiliza para cubrir heridas y evitar que se infecten.


Hay diferentes tipos de gasas, desde las más simples de algodón hasta las más avanzadas de poliuretano.
Las gasas estériles se utilizan para cubrir heridas limpias y evitar que se infecten.


Para heridas más graves, se utilizan gasas impregnadas con antibióticos o antisepticos.

Las gasas para heridas se cambian habitualmente cada 24 o 48 horas, o inmediatamente si se mojan o se ensucián.


Para evitar la infección, es importante seguir las instrucciones del médico o enfermero sobre cómo limpiar y cambiar la gasa.