alfombras para alergicos

La alergia es una respuesta exagerada del sistema inmunológico a un estímulo, como el polen, el pelo de los animales o los ácaros del polvo. Aproximadamente el 10% de la población es alérgica a algo y la alergia es la quinta enfermedad crónica más común en los Estados Unidos.

Según los especialistas, la alergia es una enfermedad emergente en todo el mundo.

Las personas con alergias pueden tener síntomas leves, como picazón y estornudos, o síntomas severos, como dificultad para respirar, hinchazón de la garganta y anafilaxis, una reacción alérgica potencialmente mortal.

Aunque no hay cura para las alergias, los medicamentos y otras medidas pueden ayudar a controlar los síntomas.

Una de las mejores maneras de prevenir los síntomas de alergia es evitar el contacto con las sustancias que causan la reacción.

Sin embargo, esto no siempre es posible. Por ejemplo, es imposible evitar el contacto con el aire.

En estos casos, la mejor manera de evitar los síntomas de alergia es reducir la cantidad de alérgenos en el aire.

Uno de los lugares donde los alérgenos pueden acumularse es en las alfombras.

Los ácaros del polvo, que son uno de los principales alérgenos, se alimentan de los desechos de las personas y de los animales, que se acumulan en las alfombras. Las alfombras también pueden acumular pelo de animales, polen y otras sustancias que causan alergias.